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(Annie Spratt)

Por Duda Oliveira, para la Cobertura Colaborativa NINJA en la COP26

Si pensamos en la crisis climática, inmediatamente nos ocurre: el calentamiento global. Pero más allá de este tema, debemos poner nuestra atención en las personas más afectadas por él. Entre las personas más afectadas se encuentran las mujeres.

Con el planteamiento de la Conferencia de Naciones Unidas sobre Cambio Climático y la demanda de la sociedad civil de más representantes femeninas en los principales ámbitos de debate sobre la crisis climática, como la propia COP-26, hablar de género y clima se vuelve indispensable.

Al darse cuenta de que el género no era un tema común abordado en las agendas climáticas, el Observatorio del Clima lanzó una comunidad llamada Género y Clima, que busca profundizar el debate sobre cómo el cambio climático afecta, de diferentes formas, las expresiones de género dentro de los estratos de la sociedad.

Para ilustrar toda la investigación realizada, la comunidad de Género y Clima lanzó una infografía en julio de 2021, que explica visualmente las principales preguntas sobre el tema. La infografía fue creada en base a discusiones desde 2020 e incluye temas como raza y clase social, además de traer información sobre colaboraciones femeninas para el avance en la contención de la crisis climática.
La infografía muestra que el cambio climático afecta de manera desproporcionada a niñas y mujeres, como quilombolas, mujeres negras, indígenas, de la periferia, jefes de familia, pobres, transexuales y agricultores familiares.

Y aunque las mujeres ya están contribuyendo a la lucha contra la crisis climática, son poco reconocidas por ello. Algunas contribuciones mencionadas en la infografía son la diversificación de ingresos, garantía de seguridad alimentaria, protección de la biodiversidad, preservación de los conocimientos tradicionales, restauración de bosques, innovación y emprendimiento, trabajo en agroecología y economía solidaria, defensa de sus territorios y garantía de seguridad hídrica.

La infografía también indica que las mujeres están infrarrepresentadas en espacios donde se toman las decisiones que más afectan su vida, como en grandes proyectos de construcción, minería, política ambiental, derechos territoriales, urbanismo y movilidad, ciencia, derecho a la vivienda y en foros internacionales. sobre el cambio climático.

Salud Reproductiva
Como si no bastaran todos los temas sociales para relacionar el clima con la agenda de género, la salud reproductiva también se ha convertido en una preocupación, especialmente para quienes viven en las cercanías de las plantaciones de soja. A mediados de 2018, comenzaron a aparecer algunas quejas que relacionan el plaguicida más utilizado en Brasil, el glifosato, con procesos de aborto, muertes neonatales e incluso contaminación de la leche materna en personas que vivían cerca del terreno donde se usaba el plaguicida.

En septiembre de 2018, la agencia de noticias The Intercept Brasil presentó acusaciones por contaminación por glifosato en Uruçuí, en el sur del estado de Piauí, región en donde el pesticida se usa en plantaciones de maíz y soja. La denuncia menciona abortos espontáneos, abortos tardíos, malformación del feto, contaminación de la leche materna, bajo aumento de peso en los bebés, intoxicación pasiva de la mujer por pesticidas y otras cuestiones laborales.

En septiembre de 2020, el diario español El País publicó un artículo con otras denuncias sobre el uso de glifosato desde 1998, pero esta vez, en el sur de Colombia. Las denuncias incluyen abortos, abortos tardíos, partos prematuros, muerte neonatal, muerte materna y secuelas por contaminación con plaguicidas.

El ejemplo del glifosato es uno entre cientos de otros ejemplos de problemas que enfrentan las mujeres a causa de la agroindustria y las crisis climáticas. Se espera que la situación de las fuerzas femeninas alrededor del mundo también sea el foco de debate en la COP-26, además, la organización aceptó la solicitud de que más mujeres ocupen espacios de discurso en el evento.

Traductora : Bianca Guzzo – [email protected]