¿Iniciativa histórica o mercantilización de los bosques? Carlos Rittl habla sobre el TFFF
Director global de Políticas Públicas para Bosques y Cambio Climático de la Wildlife Conservation Society, contribuyó a la implementación del proyecto
Júlia Neves, de la Cobertura Colaborativa de NINJA en la COP30
Este jueves (6), durante la Cúpula del Clima en Belem (PA), fue oficialmente lanzado el Fondo Bosques Tropicales para Siempre (TFFF), iniciativa histórica que promete revolucionar la cuestión del financiamiento ambiental. En esta ocasión, el director global de Políticas Públicas para Bosques y Cambios Climáticos de Wildlife Conservation Society, Carlos Rittl, contó a Media Ninja los detalles sobre la implementación del proyecto.
Ninja – Contanos qué es el “TFFF” del que todo el mundo está hablando?
Carlos Rittl – El TFFF es un mecanismo financiero para remunerar países, comunidades locales e indígenas – los mejores guardianes de los bosques- , por el papel que desempeñan cuidando estos territorios. Entonces, los países que tengan las tasas de deforestación bajas tendrán el derecho de recibir recursos financieros proporcionales a las áreas de bosques restantes, pero también tendrán tasas de descuentos proporcionales a las áreas deforestadas y degradadas y la obligación de realojar al menos el 20% de los recursos para los pueblos indígenas.
Ninja – ¿Es algo realmente innovador?
Carlos Rittl – Es innovador en varios aspectos. Primero, por su lógica no está basado en donaciones. Se obtienen recursos del gobierno o del mercado financiero, de fondos de pensión, por ejemplo. Y esos recursos son colocados en el fondo financiero del TFFF, llamado TFIF (Fundo de Investimentos de Florestas Tropicais) y a partir de ahí, son invertidos en áreas coherentes con el propósito del proyecto. Las ganancias de estas inversiones se pagan a los inversores y los lucros excedentes, a la tasa fija acordada inicialmente, remunera a los países comprometidos que cumplan determinados criterios de elegibilidad. Es innovador porque la lógica cambia. Se crea un instrumento basado en inversiones para remunerar a países con base en el área de “bosques en pie», con descuentos por el incumplimiento del acuerdo y con las obligaciones de distribuir un porcentaje para los pueblos tradicionales. Además de eso, yo creo que, de forma inédita, por primera vemos tenemos un instrumento financiero para los bosques y el medio ambiente que invita a los pueblos indígenas y a la comunidad local para “diseñar” y discutir, principalmente dos cosas: primero, como el TFFF no representa una amenaza a los derechos – por el contrario, fortalece los mismos – y segundo, como garantizar el acceso directo a aquellos recursos del 20%. Cuáles son los caminos para que eso realmente llega a las organizaciones y no sea apropiado por el gobierno que, simplemente lo selle aquí y allá, afirmando que el dinero fue invertido en políticas dirigidas a los pueblos indígenas…Por eso, la Alianza Global de Organizaciones Territoriales (GATC), fue invitada para coordinar un proceso de consulta a las organizaciones de los pueblos indígenas y comunidades locales, a escala global, para escuchar diferentes voces, contextos, necesidades y preocupaciones para que podamos definir la estructura y el concepto del TFFF.
Ninja – ¿Cuál es su relación con el TFFF hasta ahora?
Carlos Rittl – En 2023, comencé a dialogar con el gobierno brasileño para entender mejor en qué punto se encontraba la PEC, ya que había un proceso iniciado para presentar el proyecto en la COP28, que sucedió en Dubai, en Emiratos Árabes. Después de eso, de manera voluntaria, yo y varios colegas de mi organización comenzamos a hacer algunas sugerencias. Por ejemplo, al inicio, la propuesta de Brasil no incorporaba el componente de degradación como un factor que resultaría en descuentos, entonces comenzamos a argumentar que los bosques en pie son muy importantes, pero que los bosques degradados no desempeñan el papel de bosques con más integridad, desde el punto de vista del clima y la biodiversidad, principalmente para los pueblos indígenas y las comunidades locales. Esa fue nuestra primera contribución. Al año siguiente, comenzamos a ayudar en la discusión de cómo mapear los bosques tropicales lluviosos, ya que el proyecto contemplaba premiar a países por la conservación de esos mismos bosques. Buscamos saber dónde estaban esos bosques, cuáles eran las referencias técnicas para mapear e identificar donde había biomas comparables alrededor del mundo. De ahí, en octubre del año pasado, fuimos invitados para participar en las reuniones entre los países, el llamado Comité de Orientación del TFFF que, además de Brasil, contaba con la participación de Colombia, República Democrática del Congo, Indonesia, Malasia, Noruega, Francia, Alemania y Reino Unido. Nosotros dábamos apoyo técnico para responder a las preguntas surgidas por estos países, por las organizaciones y por el público.
Ninja – Después del lanzamiento, ¿cuál es la sensación y la lectura que vos haces de este momento?
Carlos Rittl – Creo que fue un día extremadamente importante. El proyecto nace de forma oficial, pero todavía debe ser institucionalizado. Tenemos un concepto en papel, pero aún deben crearse instancias de gobernanza… Recientemente, el Consejo aprobó que el banco sea la entidad oficial que hospedará al TFFF, entonces precisamos alinear las cosas. Es como si tuviéramos una planta de una casa pero que todavía precisa ser erguida. El día de hoy consolida este proceso de construcción colectiva que nace del sur global, que invita a comunidades y pueblos indígenas para participar y mostrar como el posible crear una solución innovadora, mismo en una COP con tanto simbolismo por ser realizada en el Amazonas, lugar de dos grandes líderes del proyecto, las ministras Sonia Guajajara y Marina Silva. Fueron ellas, junto con Fernando Haddad, que contribuyeron para que el TFFF se convirtiera en una pauta prioritaria para el presidente Lula. Los anuncios de aporte de recursos que ya tenemos, algo en torno a los $5 billones, son importantes, pero, además de eso, es la cantidad de países que presentaron su apoyo. Mucha gente está mirando apenas a los países que aportaron recursos, pero para mí, la señal de suceso del TFFF viene de otro lado. De los más de 50 países tropicales en desarrollo que tienen bosques tropicales y que firmaron la carta de compromiso con el proyecto, por ejemplo. Eso es un indicativo de suceso. Se está gestando algo nuevo, en una escala nunca vista, de una forma diferente. Este esfuerzo colectivo y la creencia en el concepto muestra que es posible hacer que el TFFF comience, mejore a lo largo del tiempo, y sea probado y perfeccionado.
Ninja – Surgieron algunas críticas después del lanzamiento del proyecto, respecto a la mercantilización de los bosques. ¿Cuál es su opinión respecto a estas perspectivas?
Carlos Rittl – El TFFF no vende nada. El mismo se basa en una lógica de inversiones, pero se apropia parte de las ganancias para causar impactos positivos, para apoyar a los países que ya han hecho esfuerzos en la reducción de la deforestación y para reconocer el papel de los pueblos indígenas y las comunidades. No hay ninguna comercialización, en este caso. El hecho de estar basado en una lógica de inversiones es algo innovador. Inclusive, en un momento en el que sabemos que la brecha en las inversiones para los bosques es enorme y los recursos destinados a las comunidades en ínfimo… Los países que ese año cumplan con los criterios de elegibilidad van a recibir remuneración, siempre que cumplan con las reglas de realojamiento de los recursos. Al año siguiente, se continúan atendiendo, continuarán recibiendo los recursos proporcionales a las áreas de bosque. Una vez que, dejen de cumplir los criterios o la tasa de deforestación suba, dejan de recibir los pagos. Para quien cree que deberíamos tener donaciones, ya que los bosques tienen un papel fundamental y deberían ser reconocidos por eso, yo también estoy de acuerdo con ello. Pero estos instrumentos, hoy en día, no existen.
Ninja – El señor dice que el TFFF puede generar recursos en una escala nunca antes vista. ¿Cómo sería eso?Carlos Rittl – Vamos a imaginar un escenario en el que el TFFF alcanza la meta de movilizar 125 billones de dólares en inversiones y está generando entre tres a cuatro billones de dólares por año, con el 20% siendo destinado a pueblos indígenas y comunidades locales y tradicionales. Eso daría entre 700 y 800 millones de dólares por año. ¿Ese recurso existe hoy en día? Si pensamos en un horizonte de 5 o 10 años, vamos a estar hablando de un recurso mayo de todo lo que ya fue movilizado en los últimos 20 a 30 años. Creo que existe un mérito en eso, existe un mérito en la idea y, nuevamente afirmó que, el hecho de que tengamos la participación de comunidades en el diseño del mecanismo es algo que muestra las condiciones en las que debe funcionar para beneficiar a los vuelos indígenas y a las comunidades tradicionales que fueron colocados directamente por esas personas. Para hacer parte de esto, ellos hablaron de como veían que debería funcionar, como veían sus derechos y cómo veían el acceso a los recursos y es eso en lo que creemos.